Consiste en ir recogiendo dentro de una caja, a modo de tesoro, nuestros secretos y vivencias, huellas de diferentes momentos vividos que sirven para darse a conocer y también para conocer mejor a los demás.
Compartir estas historias de vida nos ha permitido ir tejiendo lazos entre nosotros, reconocernos, repensarnos e involucrarnos en las vidas de los demás, conociéndolas de primera mano y forjando poco a poco una amistad que durará muchos años.
Cuando Manuel vino a compartir su caja con nosotros vino muy bien acompañado por sus padres y su tía. Nos contó que le gustaba tocar la guitarra con su papá y que hasta tenía una guitarra que era sólo suya.
El papá de Manuel, estuvo tocando para nosotros y derrochó arte `por los cuatro costaos´.
Aquí os dejo algunas foto y vídeos para que lo disfrutéis también.
No he podido subirlos vídeos porque pesan mucho. los intentaré comprimir a ver...
ResponderEliminarQué pedazo maestra eres, Maricarmen...me gusta cuando dices "escuchar a nuestro alumnado". Así llevo yo haciendo desde que llegué aquí: y me he dado cuenta que, en lo musical, tenemos una auténtica bienal del flamenco y que podemos y "debemos" aprender del arte que llevan dentro y reconducirlo educativamente. Sigamos flamenqueando pues.
ResponderEliminar